Las excavaciones han sacado a la luz un tramo de calzada romana, un castro de la Edad del Bronce y material arqueológico del Paleolítico Inferior y Medio
Hacer un recorrido transversal por el patrimonio arqueológico, cultural y paisajístico de Abia de la Obispalía y Huerta de la Obispalía es posible si se completa la Ruta de La Calzadilla, un sendero que ya formaba parte de la red de la Diputación Provincial de Cuenca y que ha sido arreglado este año.
Durante las obras, que han contado con la supervisión arqueológica de Santiago David Domínguez, han salido a la luz nuevos tesoros que ya son visitables.
A lo largo del recorrido, de unos 22 kilómetros de distancia y dificultad alta, han aparecido un tramo de calzada romana muy bien conservada, en Abia de la Obispalía, un castro de la Edad del Bronce en Huerta de la Obispalía y material arqueológico del Paleolítico Inferior en distintos puntos del recorrido, tal y como señala a Las Noticias de Cuenca el director de Heroica Arqueología, Santiago David Domínguez. “El castro tiene unos 800 años de antigüedad, está muy conservado y sus murallas se aprecian muy bien”, dice.
Respecto a los materiales arqueológicos hallados apunta que van desde la época de los neandertales del Paleolítico Inferior hasta el Paleolítico Medio.
A todo esto hay que sumar los hallazgos que ya se conocían y entre los que destacan el despoblado de San Roque, en Huerta de la Obispalía, que estuvo habitado en la época medieval en el que se pueden apreciar los restos de una casa rupestre y corrales para el ganado.
“Es un eremitorio muy chulo. Todavía se conserva un arco de herradura, lo que nos dice que ahí vivía un eremita cristiano de la época islámica”, señala el arqueólogo. Además, alrededor hay una zona de enterramiento.
Domínguez apunta que durante el arreglo del sendero, desde el punto de vista arqueológico, han prestado especial atención al patrimonio etnográfico de la zona como corrales, bancales de cultivo y colmenares porque “todo eso que parece no tener importancia sí la tiene puesto que nos da pistas de la forma de vida existente desde la Edad Media hasta hace 50 años en esta zona de la provincia”, cuenta el arqueólogo.
En Huerta de la Obispalía destaca el ya conocido yacimiento de Pradollano, un poblado visigodo que enfrente tiene también tumbas de la misma época. “Es una necrópolis visigoda que se encuentra junto a más de 10 eremitorios”, relata Santiago David Domínguez.
“Lo chulo de esta ruta es que tiene contenido desde el inicio de la presencia humana en la zona, más de un millon de años, es decir, del Paleolítico, hasta época incluso contemporánea pasando por la Edad del Bronce, época romana, visigoda e islámica” y está señalizada, cuenta con paneles explicativos y se han hecho panfletos para hacer la visita más completa. A parte su belleza paisajística y los cascos urbanos de Huerta de la Obispalía y Abia de la Obispalía hacen la experiencia “mucho más completa”, concluye.
Fuente: www.lasnoticiasdecuenca.es
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