El nombre de minerva
viene de la iglesia de Santa María sopra Minerva de Roma, una joya
barroca llena de obras de arte. ¿Por qué no hacerla una visita cuando
vayamos a Roma en recuerdo de la minerva nuestra? Ella le tomó de un
templo pagano anterior a la diosa Minerva Calicidica que había en el
paraje. Cristianizada ya la ciudad, hubo allí unas monjas de rito
bizantino griego. Hasta que, entre 1266 y 1275, la iglesia pasó a los
dominicos. Con lo cual estaba puesta en razón su vinculación al culto
del Santísimo Sacramento. Dominico fue santo Tomás de Aquino, el autor
de los textos latinos que los sepulvedanos seguimos cantando en nuestras
minervas, o sea el Pange lingua y el Tantum ergo.
Dicen que el Papa se
los había encargado a él y al franciscano san Buenaventura, citando a
los dos juntos para cotejarlos y elegir. Pero intercambiándoselos
mientras esperaban ser recibidos, a san Buenaventura le gustó tanto el
de santo Tomás que rompió el suyo. Muchas cofradías del Señor se
agregaron espiritualmente a la de la Minerva de Roma. Y de ahí la
adopción de su nombre. En esa iglesia romana se celebran el segundo y el
tercer domingo. En el cuarto y el quinto la había en otras iglesias de
la ciudad eterna.
Se
cita el año 1540 como el de la fundación de la cofradía de Roma. Pero
hay que precisar más. Antes hubo allí la llamada Escuela del Santísimo.,
que era una hermandad sacramental también. Ya en 1538, el dominico
Tommaso Stella había fundado la Escuela del Sacramento en una parroquia
de la diócesis de Milán, Cassago, a la espera entonces de la visita
pastoral de su arzobispo, el infatigable san Carlos Borromeo. Paulo III
la aprobó como modélica el año siguiente. Los terceros domingos iban en
procesión los hombres y las mujeres del pueblo con capas hechas
exprofeso. En Italia estas Escuelas del Santísimo eran sólo de seglares.
En cambio en Alemania nada más que de clérigos. Por este camino
amontonar nombres sería fácil. Sólo citamos al azar Fregona, cerca de
Vittorio Véneto, y San Antonino, en la diócesis de Tortona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario